MARTES 3- 8-2010
Cosa poco usual, pasó un ciclista en solitario cuya familia, los Correa, descendía de Carrión, y se dedicaban al transporte. Él emigró a Vizcaya donde actualmente reside.
Aprecié el detalle de otro peregrino que, mirando el libro de firmas, vio que varios de Guipuzcoa y Vizcaya no habían puesto España como él hizo. Deseaba que sirviera de ejemplo para los próximos. Por su proceder nos sacamos unas fotos.
De Madrid pasaron dos peregrinos ciclistas que habían emigrado de esta zona y estaban al corriente de nuestras costumbres, muy simpáticos e interesados por la vida en estos pueblos tan pequeños.
Casi al mismo tiempo llegaron otros dos ciclistas de Toledo. Uno trabajaba en una gran bodega llamada de San Antonio de Padua. De cualquier lugar y profesión hacen con verdadera dedicación este bendito Camino de Santiago. Les saqué una foto a los cuatro ciclistas.
Por la tarde muy sofocados por el calor, pasaron tres ciclistas catalanes, que quedaron encantados con la iglesia por lo bien cuidada que estaba.
Apreciaron la particularidad que tiene su puerta de entrada por debajo de su torre, cosa que me han dicho sólo tiene otra iglesia en toda España.
Pasaron finalmente cuatro jóvenes de Madrid, que acaso no pasaran de los 18 años,derrochando simpatía y ganas de vivir por todos sus poros y felices de recorrer el Camino con la ilusión de sus pocos años.
DOMINGO 8-8-2010
En este día pasaron juntos un catalán y un leonés. Este dijo que vivía cerca del colegio de la Asunción. Preguntaron si había misa en la Peregrina y no supe decirles a ciencia cierta si la hay pues han estado restaurándola últimamente.
Les recomendé que podía haber misa en San Juan o en San Tirso, ya que después de su restauración se ha abierto al culto.
“A todo el caminante que sigue su camino” Esta fue la dedicatoria de Ángel Mª Calero Bermejo dejó en el libro de firmas. Chico muy agradable e interesado en saber cosas de esta zona y particularmentede Sahagún.Le conté el origen de su nombre que viene de San Facundo, centurión romano que pertenecía a la legión Séptima Gémina fundadora de León. Estando destacados en las orillas del Cea recibieron el martirio en unión de San Primitivo, también centurión, por declararse cristianos.
Cuenta la historia que los devotos de Sahagún recogieron sus cuerpos y les dieron honrosa sepultura. Les consideraron siempre santos por el milagro que llaman de Las Lanzas.
Los que acompañaban el traslado de sus cuerpos dejaron sus lanzas clavadas en el suelo junto al río y al amanecer se habían convertido en hermosos ramos floridos.
Las imágenes de estos dos centuriones, que exhiben sobre sus trajes la palma del martirio, flanquean el altar mayor en la capilla recoleta de San Juan de Sahagún.
“Siete niños de Jaén: Edu , Luis, Charles, Silver, David, Gonzalo y Juanma. Encantados de haber visto la iglesia de Moratinos” Esta larga dedicatoria dejaron estos autoproclamados niños que, aunque parece un poco exagerada, no lo era tanto pues su juventud era notoria.
El más joven me dijo que tenía 14 años y el más veterano 17. No pertenecían a ningún club, solamente eran siete amigos que se habían puesto de acuerdo para hacer esta peregrinación. Llevaban sus bicicletas equipadas a la última y pensaban llegar a León donde las revisarían a conciencia en un taller especializado.
Alienta ver a estas pandas de amigos que con entusiasmo juvenil se sacrifican haciendo el Camino.
Se dan casos de padres que ayudan a sus hijos a hacer el Camino. El matrimonio madrileño compuesto por Juan Carlos y Victoria esperaron a sus hijos Isabel, Antonio y Juan, que según ellos estaban a punto de llegar a este bello pueblo.
El objeto era llevarles en coche a comer en un restaurante de Calzadilla, pasar la tarde juntos y después de pernoctar y reparar fuerzas traerlos de mañana hasta Moratinos para que siguieran el Camino.
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