domingo, 10 de mayo de 2009

ATENAS, CORFÚ, DUBROVNIK Y VENECIA

Esta es la última entrega de nuestro crucero por el Egeo y el Adriático. Esperemos que os haya gustado












El puerto del Pireo es sin duda el de mayor tráfico de los que hemos visitado. Sólo es superado en el Mediterráneo por los puertos de Marsella y Génova.
En sus múltiples diques de atraque se ven a muchos cargueros y a grandes buques de recreo, que aprovechan la moda imperante de los cruceros.
Además de este tienen otros dos puertos muy próximos. Uno que dedican a embarcaciones de recreo y otro para competiciones deportivas.
No puedo comprender cómo Atenas, que está muy próxima y construida entre siete colinas, esté de espaldas al mar.
No creo que fuera por el aspecto defensivo porque, aunque está situada tierra adentro, carece de murallas.
Todos los monumentos más representativos están en alto, en la Acrópolis, para lucir mejor su incomparable arquitectura.

Los estilos dórico, jónico y corintio están representados en los variados complejos y templos, que aunque algunos muy deteriorados, muestran a las claras su antiguo esplendor.
Su restauración es muy costosa y durará muchos años, ya que las partes más vistosas fueron robadas o deterioradas por las diferentes culturas que por aquí han pasado.
Atenas con sus colinas parece que fue creada para inmortalizar las sabias doctrinas en todos los ramos del saber de sus ilustres pensadores.
En el Ágora se reunían los grandes filósofos como Sócrates y Platón que enseñaban los principios esenciales de la ciencia.
El Partenón visto desde su cara Noroeste ofrece todavía un singular aspecto arquitectónico pues sus arquitectos dominaban a la perfección las más modernas técnicas.

Llaman la atención también las seis estatuas de las Cariátides que sustentan, al parecer, bajo sus frágiles cabezas el peso del templo.














La ciencia que aquí se engendró fue asimilada por los romanos, que la expandieron por todo el mundo occidental. Todavía hoy el derecho romano es la base fundamental donde estriba todo nuestro entramado legal.
Aunque nuestra lengua tiene como base la lengua latina, de la que procedemos, encontramos multitud de palabras de raíz y procedencia griega que han contribuido en gran manera al enriquecimiento actual de nuestro universal idioma.
Lo más típico y original que vimos, fue el uniforme de los guardias oficiales que custodian el edificio del gobierno.














Sobre su blanco uniforme llevan una casaca de diferentes colores. Cubren su cabeza con un casquete rojo adornado con larga borleta negra. Sobre las punteras de sus zapatos acharolados lucen un llamativo bordón también negro. No se les permite cambiar de posición más que cada cuarto de hora, permaneciendo rígidos como estatuas.
Desde el autobús vimos algo de la Atenas moderna. Entre algunos edificios muy bonitos, destaca el palacio donde nació la reina Sofia, por sus grandes y bien cuidados jardines. La distribución de sus edificaciones denota su buen gusto por rodearse de todas las ventajas que requiere la vida moderna.

C O R F Ú

Esta bella isla es la más septentrional de las islas Jónicas. Constituye un vergel si se la compara con otras muchas de Grecia que por falta de lluvia tienen un entorno muy árido y montañoso.
Corfú en cambio goza de más precipitaciones y dispone de buenos manantiales con los que se riegan muchas huertas, manteniendo una exuberante vegetación.
Destaca entre sus monumentos el palacio de la celebre princesa Sissí, tan alabada en tantas películas. En una pequeña ensenada destaca la construcción de una recoleta iglesia que ocupa toda la isla embelleciendo por su originalidad todo el entorno.


Es la isla más poblada de Grecia, separada del continente por un estrecho canal. Su superficie es de 593 km2, y unos 220 kilómetros de costa.
Esta dominada por macizos montañosos que llegan a los 1000 metros sobre el nivel del mar. Destaca el monte Pantocrátoras que divide la isla en tres zonas.

La principal ventaja que tienen estos barcos en los que hemos viajado es que, sin cambiar de camarote, puedes recorrer varias ciudades sin tener el simple molesto engorro de hacer las maletas.
Otra ventaja no menor, es que mientras duermes con toda comodidad, te trasladan a lugar distinto del que te has acostado.
El temible mareo no se da en estos barcos, pues llevan tal estabilidad que parece que no están navegando, con lo que la vida a bordo se desenvuelve como en cualquier hotel.
Acaso aventajen a este en cuanto a dotación de servicios, pues entre los tripulantes reglamentarios y un amplio numero de encargados de todas las tareas de mantenimiento, supere en mucho a la de un hotel de la más alta clasificación.
Esto redunda en la limpieza esmerada en los camarotes, que siempre procuran que la cama este bien hecha, aunque tengan que repetir la labor varias veces. Al final del día encuentras la cama abierta, un detalle que no he visto en otros hoteles.
Para más información llevan en los camarotes una televisión que al principio de la programación te da un fax con la posición exacta que lleva el barco y un sin fin de canales muchos de ellos en castellano.
Por motivos de seguridad no dejan ver a los pasajeros de la línea de flotación para abajo. Será extraordinario el motor tan poderoso que necesitan para mover, a más de cincuenta millas, este mastodonte de siete plantas, con todos los servicios para comodidad del pasajero, sin olvidar el equipo de barcazas de salvamento.
Las estuve echando un vistazo y técnicamente no las falta un detalle. Para izarlas al mar disponen de un brazo mecánico articulado que las posa en la superficie una vez que son ocupadas por los pasajeros. Van dotadas de un motor eléctrico autónomo, una capota de plástico para impedir la entrada de agua y unos cordeles colgando de sus laterales donde poder agarrarse desde la superficie.
Todo preparado para hacer una evacuación rápida y segura. Lo peor en estos casos será el nerviosismo de todos, que puede complicar mucho a priori. También tuvimos una alarma ficticia para aprender a ponernos los chalecos salvavidas.
También dispones de amplios salones para toda clase de espectáculos, tiendas de compras, terrazas, baños, piscinas, jacuzzis y toda clase de entretenimientos para hacerte la vida más agradable.
El cuidado de la higiene es primordial. Tienen unos recipientes a la entrada del barco y todos sus comedores, que al pasar las manos por debajo de ellos, sueltan un chorrito desinfectante de alcohol perfumado.
Por la influencia de las películas de ambiente marino, se tiene la idea que todo tiene que estar sujeto para que no se caiga. En este barco no estaban sujetos al suelo más que las mesas grandes y algún mueble pesado. El menaje tanto de la cocina, comedores y camarotes va completamente suelto, sin que se derrame una gota de un vaso lleno hasta los bordes.
También encuentro algún inconveniente, entre ellos una especie de claustrofobia, porque aunque tienes dentro todos los servicios, no te mueves con la libertad que te da siempre la tierra firme.

















DUBROVNIK
En esta población el cálido clima mediterráneo es el factor principal para el desarrollo de la abundante vegetación. En sus numerosos huertos tienen plantaciones de limones, naranjas y palmeras cultivando también plantas exóticas traídas por los navegantes en sus múltiples viajes.
El noventa por ciento de su población es católica y hay estatuas de San Blas por toda la ciudad que le declaró su patrón, por haber salvado a esta de un fuerte asedio de los venecianos.
Siempre fueron rivales de Venecia, pues sus ingeniosos comerciantes compitieron en el comercio que tenían principalmente en el Mediterráneo.
Su moneda oficial es el cunas, con un cambio de 150 por cada euro.
Componían su sociedad, además de los comerciantes, una clase alta de patricios y ciudadanos de clase media.
La ausencia de guerra hizo florecer eminentes pensadores, poetas, físicos y matemáticos como el célebre Roger Boscovic.
También tuvo el primer hospital en que funcionaba la cuarentena para librar a la población tanto de las enfermedades contagiosas propias como las que traían sus muchos navegantes.
Aquí sigue funcionando la más antigua farmacia de Europa, que fundaron los franciscanos en su monasterio en el año 1317.
Dubrovnik aceptó a lo largo de los siglos XIV, XV y XVI pequeños grupos de comerciantes judíos, que escapaban de la persecución en España y Portugal. Aconsejados por estos adquirían la buena lana merina de España y luego de convertirla en excelente paño lo vendían en el mercado europeo.
Todo este gran progreso que no lograron destruir las guerras y conquistadores, lo logró el gran seismo, que, junto con un incendio, destruyó muchas y buenas construcciones.
El gran genio militar de Napoleón la conquistó en 1808, iniciándose entonces su decadencia, que aprovechó el imperio Austriaco para anexionarla.
La UNESCO en el año 1979 la incluyó por su núcleo histórico- arquitectónico, como patrimonio cultural de la humanidad.



















VENECIA

Esta ciudad de origen romano, pasó muchas vicisitudes en su fundación por la oposición de las republicas-estado de Génova y Pisa, competidoras de la navegación y el comercio y con la que tuvieron muchos periodos de guerra.
Como estos adversarios no les daba lugar idóneo donde fundar la ciudad principal de su república, tuvieron que hacerlo sobre unas pequeñas islas situadas en una laguna.
Como esta no tenía tierra firme sobre la que edificar emplearon la técnica que hoy se emplea en la construcción de puentes, que van sustentados por pivotes de hierro.
Como en aquel tiempo el hierro era escaso, lo sustituyeron por cuñas de roble, madera muy resistente a la humedad. Al no tener contacto con el aire se produjo una reacción química en la madera que en vez de pudrirse se petrificó, llevando en este estado muchos años, aguantando el peso de los edificios.
Actualmente los venecianos están contentos porque llevan una temporada que no sufren las inundaciones del mar. Creen que esto se debe a que en el Mediterráneo dominan los vientos llamados del siroco, muy cálidos por proceder del desierto del Sahara. Al evaporar gran cantidad de agua las mareas son más suaves y no inundan la bella plaza de San Marcos, como hemos podido ver muchas veces en la televisión.

Pero tal vez este fenómeno pueda ser pasajero y no se conjure el principal problema que tiene Venecia, que es su inexorable hundimiento, debido a la extracción de agua dulce de su subsuelo.
Calculan que en los últimos veinte años se ha hundido unos veinte centímetros.
Tremendo el problema que tienen para salvar una de las ciudades más ricas en monumentos y obras de arte y se estudian dos procedimientos cual a cual más costoso.
Uno consiste en insuflar en el subsuelo cemento a presión que cortara el hundimiento y otro tal vez el más efectivo, que consiste en hacer un dique en el mar para que las temibles mareas no llegaran a la ciudad.




En el medio día que aquí pasamos no tuvimos tiempo más que para visitar el Gran Palacio Ducal.
Es admirable la magnificencia con que están decoradas sus muchas dependencias.
Allí se amontonan pinturas y esculturas de los más célebres pintores y escultores de la época. Destacan las pinturas de Tintoreto, nombre heredado de su padre que era teñidor de telas. Tiépolo gran pintor del setecientos. Giovanni-Bellini, Ticiano y otros muchos.
La sala de los ciento con gran capacidad para albergar a los cien regentes de la República, no tiene ni un centímetro cuadrado que no esté pintado, tanto en el techo como en las paredes, todas enmarcadas por soberbios bajorrelieves dorados.
Tampoco faltan techos con artesonados con maderas nobles con tablas bellísimas.
En una sala que llaman de las cuatro puertas, se aprecia el gusto de todas y cada una, pues son todas diferentes en diseño y ejecución.
Esta república de Venecia, como rival y competidora en el comercio de las de Génova y Pisa, usaba toda esta magnificencia y derroche de recursos como exhibición de su poderío y marcar su preponderancia en todo el mundo civilizado de entonces.
Como celosos guardianes de su favorable situación, no les temblaba el pulso en castigar severamente a todo aquel que no cumpliese sus leyes.
Debajo de estos magníficos salones antes descritos, tenían las cárceles más severas. El castigo menor de los penados consistía en tenerles encerrados en mazmorras forradas de plomo, con el objeto de que en el invierno aumentara el frío y en el verano el calor.
Además de esto, para los delitos más graves, las celdas estaban al nivel de los canales y cuando subía su nivel, inundaba temporalmente el habitáculo.
A pesar de estas férreas seguridades, un penado llamado Casanova logró fugarse y su nombre ha quedado como emblema de los buenos especialistas en fugas.

REGRESO A VALLADOLID

Salimos de Venecia en una tarde lluviosa en la que las gotas de agua, reflejadas por el sol, hacían un arco iris completamente redondo, cosa que solo se puede contemplar desde la altura de un avión.
Desde el aire, Venecia se ve como un conjunto de islas que el hombre ha ido uniendo, para hacerlas más habitables.
Cerca del aeropuerto existen como dos lenguas de tierra completamente llenas de casas. Como no tienen mejor salida que el mar, todas tienen un pequeño embarcadero. A una considerable distancia se ve una pequeña isla completamente ocupada por viviendas.
Para despegar los aviones tienen que hacerlo en dirección norte para librarse de una amplia zona de canales muy anchos y en parte habitados, que dominan el NO. de Venecia.
Al poco de despegar se cruza por los Alpes, zona muy montañosa, pero se ven trozos irregulares entre las crestas de montaña, que por su color verde, deben aprovecharse para prados.
Apenas se divisan zonas despobladas, pues se ven casas ubicadas en cualquier valle que esté un poco abierto.
Se pasa luego por la zona francesa del litoral mediterráneo que está densamente poblada, viéndose muy bien sus buenas playas de la costa azul y sus puertos de Génova y Marsella.
Se cruza un poco trecho por el Mediterráneo español y por el Este de los Pirineos se aproxima a Zaragoza por su lado Norte, entrando ya en los llanos de la meseta.
El avión de vuelta, también de bajo coste, estaba algo mejor que el de ida, pero con las deficiencias anteriormente señaladas.
Resumiendo: Estos viajes de crucero, tan en boga actualmente, tienen a su favor la comodidad de tener un refugio permanente para el descanso, aunque recorras medio mundo, pero resulta un tanto acelerados por la ambición que tienen en que veas el mayor número de poblaciones en el mínimo tiempo posible.





1 comentario:

Maripaz dijo...

Modesto, hace tiempo que estoy fuera y no te visitaba ...

Acabo de llegar de Sevilla, estuve en la Feria y luego, me quedé quince dias allí .He disfrutado mucho !!!

Veo que sigues muy animado con tu blog ... que bién lo cuentas todo ...con todo lujo de detalles .

És muy interesante y se aprende mucho

Un beso para tu mujer y para tí

MariPaz